No es que importen más las cortas que las largas. Siempre fui fiel creyente que, al igual que en las artes marciales, una partida de DotA se define en cuestión de segundos. No importa mucho si eres el mejor jugador del mundo, lo que importa en verdad es que lo seas en el momento exacto, justamente en el instante donde se decide la partida (un contra ataque, una estafa, un momento de debilidad o desunión donde se desesperan por salvarse unos a otros y mueren tontamente uno por uno). Ahí, y después de haber provocado el desbalance a tu favor, no hay diferencia alguna entre si recién juegas o si lo has hecho desde años atrás.