Tu memoria RAM es insuficiente para lo que estás ejecutando en ese momento. Trata de cerrar los programas que no necesites al momento de jugar, como Messenger, Internet Explorer, Windows Media Player, etc. También ejecuta una limpieza de tu PC con programas como Tune-up Utilities, CCleaner, así como un antivirus para descartar que tengas un virus que esté desperdiciando recursos. Si aún después de esto no mejora en nada, intenta formateando tu disco duro, o en lo posible, hacer un upgrade a 2Gb de RAM.